
obstáculos. No podrás esquivarlos porque si pasas por el lado siempre estarán allí cuando vuelvas. ¿Qué puedes hacer? Puedes coger carrerilla y saltarlos, ponerte tú por encima de cualquier obstáculo; o puedes pararte, coger tu chaqueta de cuero, ponerte unas botas con punta de acero y pegarles una buena patada en el culo para no volverlos a ver.