viernes, 9 de agosto de 2013

La llama.

En un cuarto oscuro cuando enciendes una vela se ilumina hasta el rincón más remoto, ¿no lo has probado? Una simple llamita da luz a un cuarto entero. Nuestro estado emocional es igual. Cuando estés mal tú eres el cuarto oscuro, tienes que buscar una llama que te ilumine. Muchas veces esa luz vendrá a través de alguien cercano o a través de alguna cosa, cuando la veas o la sientas cógela y no la sueltes, verás como tú, el cuarto oscuro, se va iluminando.

Aún en la más enorme oscuridad del cielo una simple estrella puede iluminar el cielo entero.